El graffiti hoy en día se ha convertido en una problemática debido a su nuevo carácter como expresión artística con valor cultural, digno de ser conservado.
Nació en los años sesenta en Filadelfia y se propagó con rapidez por la ciudad de Nueva York, movimiento vinculado a la cultura del Hip hop y el Rap. Se extendió por Europa desarrollándose en las periferias de las grandes ciudades como fenómeno underground.
Hoy en día encontramos el graffiti como una intervención artística realizada en el medio urbano y relacionado con el punk y el skate.
La perdida del carácter marginal y pobre del mismo ha dado lugar a esta problemática en cuanto a su conservación y restauración, ya que los realizadores de hoy en día son artistas conocidos internacionalmente y con formación académica.
Este ultimo movimiento denominado postgraffiti, en el que destacan artistas conocidos a nivel internacional como Shepard Fairey , Swoon , Invader , Banksy,etc .
Estos artistas entre otros han conseguido que los graffitis adquieran reconocimiento social, cultural y turístico generando un valor añadido a las ciudades.
Hoy en día son muchos los ayuntamientos que organizan festivales de arte urbano para realizar intervenciones que mejoren estéticamente zonas deterioradas de las ciudades; como el Festival Poliniza en Valencia o el Festival Asalto en Zaragoza.
Algunos de estos murales artísticos han adquirido un alto precio en el mercado y por esto mismo empiezan a surgir estas nuevas problemáticas dado a que ya han tenido lugar los primeros «actos vandálicos»; muros arrancados para su posterior exposición y venta en galerías.
Bien es sabido que al ser un arte realizado en el espacio urbano, su conservación adquiere un grado de mayor dificultad. Esto es debido a la posible acción de otros graffiteros, a las brigadas de limpieza y también a los mismos propietarios de los inmuebles .
Es aquí entonces donde se encuentra el papel de los profesionales en el campo de la conservación/restauración realizando una primera actuación, con urgencia: el ingreso de estos bienes en los registros y la documentación de los mismos; fotografiando y catalogando este tipo de manifestaciones artísticas cada vez mas apreciadas por la sociedad formando parte de la memoria cultural.
Para la conservación y protección de este «nuevo arte» necesitamos en primer lugar el reconocimiento artístico para conseguir una protección legal para evitar el expolio y obviamente su desaparición.
Ya se han realizado actos de inmersión de los graffitis en la protección legal, uno de los pioneros artistas en España, el graffitero Carlos Argüello, con el pseudónimo :»Muelle» fue declarado Bien de Interés Cultural y se encuentra bajo la protección de la ley por su valor histórico y cultural. Sin embargo, este hecho aislado no ha sido suficiente para que muchas de estas obras hayan sido eliminadas y/o estén en proceso de degradación con un alto grado de riesgo de desaparición.
Como siguiente paso a acometer encontramos diferentes soluciones a la problemática de los graffitis; muchas son las posibles intervenciones que se encuentran en proceso de evolución debido a su carácter innovador.
Se puede optar por la protección directa por medio de la restauración, como las actuaciones que se llevaron a cabo con el graffiti mas antiguo conocido: Madonna con niño, del artista parisino Xavier Prou, con el pseudónimo :»Blek le rat».
La obra fue realizada en Leipzig (Alemania), fue recuperada en 2013 ,después de proceder a la eliminación de carteles publicitarios que habían cubierto la imagen durante mas de dos décadas, se limpió y se protegió con un cristal protector y se incorporó un cartel informativo explicando la obra.
Esta intervención es de gran ejemplo para todos los futuros actos, debido no solo a la restauración y protección, sino también a la comunicación y difusión del valor de una obra con objeto de su reconocimiento social y artístico para la cultura y la historia de Leipzig.
Otros de los actos llevados a cabo ha sido el Strappo, para la conservación en museos o la realización de calcos para edificios que se encuentran en proceso de tramite de demolición.
El único problema radica en la definición de «arte», ¿Qué es y qué no es arte? ¿Qué forma parte de un mero acto vandálico y qué forma parte de nuestra cultura?
Este es un problema que se repite día tras día con el arte conceptual, con incalculables críticas de la sociedad …, sin embargo ¿no debería preocuparnos el simple hecho de que forman parte de nuestra cultura y que nos identifican como sociedad?
Es una discusión abierta que da lugar a infinidad de debates, pero nosotras como responsables de salvaguardar el patrimonio creemos que sí deberían conservarse, ya que forman parte de una identidad que permanece y evoluciona en nuestro imaginario colectivo y pertenece a la memoria de las ciudades y de sus habitantes.
Pero…¿es posible que una manifestación artística esencialmente efímera y creada al margen de la legalidad sea conservada como bien de interés cultural para fomentar su perdurabilidad ? Es posible. Si tenemos en cuenta que todo aquello que forma parte del testimonio de una época y que narra nuestra historia , debería ser protegido y conservado. No solo por los profesionales, si no también por las instituciones y lo que es aun mas importante por los propios usuarios que habitan los lugares mediante el respecto, la admiración y sobretodo la no intervención sobre los mismos.
Enlaces de interés:
http://www.festivalasalto.com/actividades-hq/
http://streetartdetours.com/tours/show/7
https://www.youtube.com/watch?v=Ls5fsJI_7fQ
http://www.npr.org/2015/06/27/417204222/what-right-do-muralists-have-to-the-buildings-they-paint-on
conservandoelpresente 